El Sevilla tricampeón de la Europa League

El Sevilla conquistó por tercera vez la Europa League tras vencer en los penaltis a un Benfica que seguirá luchando contra la maldición 'encarnada' de Béla Guttman, que le auguró no ganar nunca más en el continente tras su despido hace medio siglo. Si el año pasado se les escapó el título en el último suspiro de partido esta vez fue en la tanda de penaltis, Beto detuvo los lanzamientos del paraguayo Cardozo y del exceleste Rodrigo mientras que los sevillanos no fallaron ninguno. En un partido intenso y emocionante, con muchas ocasiones para ambos conjuntos pero donde las defensas se impusieron a los ataques y el partido termino sin goles.

Turín se engalano y a pesar de no llenarse completamente el estadio, ambas aficiones nos hicieron disfrutar de un ambiente espectacular durante el transcurso de la Final. El Benfica tomó el control del partido y exigió mucho al Sevilla que pronto vió como dos defensas se cargaban con tarjetas amarillas, Fazio y Alberto Moreno, este por una fuerte entrada sobre Miralem Sulejmani que lastrado por la caída tuvo que abandonar el terreno de juego sustituido por André Almeida. Beto tuvo que intervenir pronto en el partido ante varias ocasiones del Benfica que se acercaba con mucho peligro. 

El Sevilla con un claro esquema basado en mandar balones a Rakitic para que este se inventase pases, a los que nos tiene acostumbrados a ver, para que Bacca pudiera abrir el marcador en alguna llegada. El croata nos volvió a deleitar con otro partidazo de los que hacen enamorarse de él a los equipos mas grandes de Europa, volvió a ser el timón de su equipo y a estar presente en cada oportunidad Sevillista, con un gran despliegue de técnica, calidad, y trabajo supo llevar el peso de la responsabilidad que se le exige y ayudar a su equipo a conseguir de nuevo un título Europeo.

El partido no perdió ritmo en ningún momento, el Benfica intentó sacar provecho al final de ambas partes pero no lo consiguió y la final se marchó a la prórroga, con ambos equipos muy tocados físicamente poco pudimos destacar de los 30 minutos mas de juego, ambos equipos atenazados por el miedo a perder. Unai Emery sacó a un Kevin Gameiro que salía de una lesión muy recientemente pero que respondió bien y consiguió crear problemas a la defensa rival, mientras el colombiano Carlos Bacca consiguió terminar el partido muy lastrado con constantes calambres musculares debido al excesivo desgaste físico realizado.

Los dos se merecían ganar pero solo uno levantaría el trofeo y lo sabríamos tras la tanda de penaltis que se ejecutaron en la portería donde se situaban los hinchas sevillistas. El Sevilla entonces hizo un pleno de cuatro lanzamientos, con la definitiva del francés Kevin Gameiro y el Benfica erró dos lanzamientos gracias a un sobresaliente Beto que ha dejado una gran imagen durante todo el torneo, con lo que el título se lo adjudicaría el equipo Andaluz. 

Acabó la travesía del equipo sevillista en Europa con final feliz, y con gran merecimiento se ha llevado esta Europa League, atrás ya queda todo el trabajo realizado para conseguirla y ya solo les queda disfrutar con su gente de una grandísima temporada realizada. Desde Respiras Fútbol queremos darle nuestra mas sincera

enhorabuena al Sevilla FC por su hazaña.

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Guillermo Rodríguez Asensio (@guildo_95)